sábado, 30 de agosto de 2008

Esperar...

Nos pasamos la vida esperando cosas que nos gustaría que fueran, pero que siempre acaban por no llegar. Promesas, esperanzas, sueños, ilusiones... Se dice que hay que luchar por lo que se quiere, pero quien lucha y no ve beneficios se derrumba y se siente derrotado. ¿Por qué no vivir el presente, aceptando lo que nos ofrece la vida, con todas sus penas y alegrías? ¿Por qué perseguir sueños incumplidos que sólo conseguirán partir nuestra alma en dos mitades más, cada vez que fracasamos? ¿Por qué tanto masoquismo de ir siempre en busca de lo inalcanzable? ¿Por qué lo cercano y accesible nos parece siempre tan poco valioso?

No es lo que poseemos lo que nos da fuerzas para seguir hacia adelante; quien tiene todo lo que desea no sabe hacia dónde dirigirse. Lo que nos impulsa a luchar, a avanzar, a aprender y a vivir es la posibilidad de alcanzar aquello que anhelamos. Cuando cumplimos un sueño, o lo acabamos matando por doloroso, aparece otro, y luego otro... Quien no sueña ni desea, no vive, sólo participa en su vida. Una vida vacía y rutinaria, en la que no aprecia lo que realmente tiene ni ve valor a lo que no posee.

Nacer, crecer, reproducirse y morir... ¿Es realmente eso para lo único que existimos? Si fuera así, no nos diferenciaríamos de otros animales. En realidad somos la especie más débil: los únicos en tropezar constantemente con la misma piedra, los únicos que deseamos cosas y personas que no tenemos, los únicos que basamos nuestra vida en alcanzar objetivos... En cuanto algo falla, nos rompemos en pedazos como un jarrón que cae al suelo, vulnerables de ser devorados por cualquier deprededador. Y en eso se basa nuestra existencia: soñar, luchar, vencer y ser vencido, levantarse, hacer locuras y repetirlas... Si a mi vida sólo le quedara reproducirse y morir no perdería el tiempo en escribir mis pensamientos, me dedicaría a provocar un macho que me hiciese una cría y me quitaría la vida. Por suerte, aún tengo muchos objetivos marcados a los que me gustaría acceder, y desde aquí y ahora me prometo que cada vez que caiga, me levantaré con la cabeza bien alta, cada vez que un bache se coloque delante de mi camino, lo esquivaré, y cada vez que alguien intente sacarme de mi sendero, no le dejaré salirse con la suya.

lunes, 18 de agosto de 2008

Esa gran desconocida: la Fisioterapia

Esta entrada está orientada a romper con todos esos mitos que se tienen sobre la fisioterapia y los fisioterapeutas. La necesidad de aclararlo fue creciendo poco a poco, a raíz de comentarios un poco ofensivos para quien se lo toma a pecho, pero que en realidad dan pena y hay que solucionarlos. Hablando con unas antiguas amistades sobre mi carrera, salió su gran pregunta:

-Pero, ¿ya sabes dar masajes?
-Sí, los vemos en 1º, un mes y medio aprendiendo a dar masajes un día a la semana.
-Y entonces, ¿qué haces el resto de la carrera? o.O

Os lo repito... En su momento me molestó, pero en realidad me da un poco de pena. Aunque la chispa que me activó para decidir iniciar un remedio a tan bestial ignorancia fue hace unos días: Sentada en el salón, de relax con la familia, viendo la televisión. Echaban el MIR, la serie de tele5 paralela a Hospital Central, que enfoca la vida de un hospital en que: está lleno de estudiantes desde que están en 1º de carrera que se pasan la vida de prácticas y no dan clase, que se enrollan con sus adjuntos, que siempre se meten en líos... Y además, lo más normal del mundo es que el paciente continuamente cuestione la decisión del médico y le meta en problemas. Es que los pacientes de estas series saben más medicina que cualquier titulado en ello... Aunque el hecho puntual fue que una de las residentes le presentó un amigüito suyo a una amiga para que se lo ligara: "pues tía, tengo un amigo que es fisio, ya sabes, masajitos...".

Aparte de que el muchacho, por ser fisio y dar masajes, tenía que estar tremendamente bueno, los fisios son todos unos promiscuos y unos calentorros... Es cierto que nosotros avivamos el mito con el lema "Estudio fisio por sexo y vicio"... Pero eso es sólo en 1º de carrera, y con conocimiento de lo que realmente supone lo que hacemos, pero dejándonos llevar por un puñado de hormonas de estudiantes semidesnudos practicando entre ellos. Obviamente, la cosa cambia delante de un paciente.

Aunque hay poca gente que conozca la existencia de esta ciencia, los que acuden a ella la respetan, y lo que dice el fisio bien dicho está. El fisio te obliga a hacer los ejercicios y gracias a eso te recuperas. El fisio te dice que hagas una cosa y es porque esa cosa vale. No lo ponen tanto en duda como en las series de televisión. Y los que lo ponen, al menos se toman las molestias de hacer caso y posteriormente comprobar los resultados.

Pero no escribo esto para enseñaros en qué consiste ser paciente de fisioterapia... En realidad, quería escribir para enseñaros lo que hace un fisioterapeuta, por lo que os pondré ejemplos de lo más diversos para ver si de una vez desaparece el gran mito masajístico sensual para ligar con chicas guapas.

Aclararé primero lo que significa el concepto de "fisioterapia". Es la terapia física, es decir, curación a través de medios y agentes físicos, tales como el movimiento, la radiación electromagnética, las corrientes eléctricas, el calor, el frío, el agua...

Empezando con algo sencillo y más popular, un chaval de 12 años jugando al fútbol con sus amigos se cae y le diagnostican un esguince de rodilla. Pues bien, el esguince es una lesión en un ligamento. El propio cuerpo humano es el responsable de la curación de esa lesión. El fisioterapeuta no es un mago capaz de pegar algo que se ha roto. Traspasados unos días, cuando el ligamento del niño ha producido material suficiente para unir ambos extremos rotos, es cuando entra en juego el fisio, ayudando a esa mole de células organizadas en un caos a orientarse de una forma tal que resulte favorable para recuperar el estado sano del ligamento y la rodilla. Aparte de eso, durante el periodo inflamatorio el niño ha debido mantener reposo, seguramente con un yeso o venda puesto por el traumatólogo... Toda articulación inmovilizada comienza a destonificar el tono muscular de los músculos correspondientes, por lo cual el fisioterapeuta se encargará de enseñar unos ejercicios al niño para potenciar la fuerza muscular, además de reeducar la propiocepción del ligamento para evitar que recidive el esguince, todo esto acompañado de un fortalecimiento de los músculos protectores de esa rodilla para que sean capaces de reaccionar a tiempo y eficazmente ante otra situación potencialmente peligrosa para la rodilla del niño.

Siguiendo con lo fácil y popular... La fisioterapia deportiva se encarga de optimizar el entrenamiento y el rendimiento de los deportistas, además de habilitarles en "tiempo récord" para que puedan seguir compitiendo. Bien, todo eso es un mito. Aquél jugador que se rompe el menisco un día, y a los días juega un partido como si nada... Es por la cantidad de anestésicos y los apaños del fisio en su misión de conseguir que el jugador juegue... Pero lo único que hace es multiplicar el número de problemas de la lesión. Así que no penséis que existen los milagros ni los pacientes tremendamente fuertes.

Complicando el asunto: Una mujer operada de la artrosis de cadera, con una prótesis. Tras la operación es difícil andar. Tiene que estar ahí el fisio moviendo su cadera y ayudando a ganar amplitud de movimiento para que la mujer vuelva a hacer su vida normal. Por suerte, como las prótesis crean una articulación falsa, no hay retracciones en tejido articular. Pero hay que potenciar los músculos.

Entremos en tema neurológico: un paciente con un derrame cerebral, que le ha ocasionado una hemiplejia (a grandes rasgos, una pérdida de movilidad en la mitad del cuerpo). Pues bien, el caso se complica... Aquí no basta mover al paciente y enseñarle ejercicios para que gane fuerza. El fisioterapeuta se encargará de reorganizar las estructuras dañadas en su cerebro que le imposibilitan el movimiento, y de esta forma el paciente podrá volver a aprender a moverse, a andar... Pero es un proceso muy difícil y largo, y hay que entender que un paciente con este problema, así como su familia, no lo pasen emocionalmente bien.

Ahora imagináos cuando pasáis demasiadas horas en la misma posición, el dolor al intentar estirar las piernas o simplemente moverse o cambiarse de posición... Pues traslademos esto a un paciente encamado por meses en la Unidad de Cuidados Intensivos... No puede levantarse y darse un paseo para "estirar las piernas" o "que le dé el aire". Tiene que tener a un fisioterapeuta que todos los días le mueva cada articulación de su cuerpo para no quedarse completamente inmóvil y, si es posible, que le haga unos ejercicios para que mantenga la fuerza muscular, aunque si el paciente está en coma no se podría dar el caso.

Más raro aún, ya que poca gente conoce este uso de la fisioterapia: Un paciente al que han abierto en canal, me da igual que sea el pecho, el abdomen... Tras la operación, queda enchufado a un respirador automático. Para quien no lo sepa, la respiración se produce gracias a la acción de músculos, entre los que también cobra un papel importante los abdominales. Imaginad en este caso que han quedado debilitados. ¿No se necesitará un fisio que ayude a volver a respirar por uno mismo y librarse del respirador y poder volver antes a casa?

Podría tirarme la vida inventando casos y dándole un uso a la fisioterapia... Pero espero, con lo demostrado hasta ahora, haber alejado un poco de la mente de quien me lea la idea de fisio=masajes.

sábado, 2 de agosto de 2008

Zapatos

Parecerá una estupidez, pero siempre quise escribir un tema al respecto... ¿Por qué da igual el dinero que me deje en unas botas o unas sandalias o cualquier tipo de calzado..., si al poco tiempo acaban destrozados ellos o destrozados mis pies? ¿O ambos? Una vez dijo Nancy: "These boots are made for walking"... Pues hija, ya me puede explicar dónde coño las compró... Porque lo que es yo... No hay nada que me pueda poner en los pies y que siga entero después de un día fuera de casa.

Y las niñas monas que van con sus zapatitos nuevos, con tu chúpame-la-punta, sus taconcitos, sus medias... Ahí muy monas ellas... Se van de fiesta. Camino a la plaza: kilómetro y medio andando, la mitad cuesta arriba, el 40% cuesta abajo y el resto escaleras o medio llano... ¿Cómo coño aguantan? ¿De dónde sacan esa capacidad de aguantar, y con unos zapatos ultrarresistentes? Y no digamos las que se vayan más lejos... Pues aquí está e secreto... Aguantarán los zapatos..., pero no los pies. Es muy agradable ver a una mujer bonita con un vestido bonito y unos zapatos bonitos... Pero... ¿Y cuándo la chica te pregunta: "Oye, ¿tienes una tirita? Que tengo heridas en los pies" ? ¡¡¡Ajáaaa!!! O sea, que eres humana!

Siento deciros que aunque en mi cabeza parecía que el tema daría para más... No ha sido así. Pero aquí lo dejo. Aunque me hubiera gustado despotricar más al respecto. Un saludo.

\\Debbie//

martes, 17 de junio de 2008

Flashback

Llamémoslo flashback, viaje al pasado... El título es lo de menos. Es un poema escrito por una Debbie joven, anterior a la etapa pavi-sosa de las rimas cursimoñas que escribí en entradas anteriores. No es una canción de amor; son los sentimientos de una chiquilla en unas circunstancias complicadas que se le antojaron extrañas y así lo quiso plasmar. Deseo que lo disfruten o, al menos, que no traten de adivinar una escena, sino que hagan la interpretación libre de lo que pase por sus mentes.

Un puñal al corazón
y un disparo a la cabeza
igualan con certeza
semejante discusión.

Y un ardor en mi interior
va quemando cuando alcanza;
no hay en el mundo venganza
que aspire a liberación.

Y quiero gritar; no puedo.
Puedo huír, pero no quiero,
pues aún hay en mí miedo.

Un miedo por el que muero,
de una muerte que no tengo
y que, aunque no quiera, espero.

lunes, 16 de junio de 2008

Soledad

¿A qué llamamos "soledad"? Un estado de carencia de compañía, de apoyo, de refuerzo, de ánimo... ¿Situación de estar materialmente alejado de otras formas de vida? Y, ¿no se puede estar solo y, al mismo tiempo, rodeado de gente?

Sí, por supuesto que sí, y no creo que nadie haga por debatirme este aspecto... ¿Cómo saber quién está realmente, y quién es una mera ilusión, una imagen transitoria que se escapará por la vía más fácil? ¿Cómo saber cuándo una sonrisa es sincera? ¿Cuándo lo es un abrazo, una caricia, un guiño...? Miras a tu alrededor y te ves inmerso en un mar de ¿personas?, tal vez ni siquiera eso... Pequeños y discretos tiburones esperando a que tropieces para pegar el mordisco a tu asqueroso trasero... Y luego: "¡Ahí va! Fue sin querer". ¡Gilip-cof cof cof! Cientos de brazos tendidos hacia ti te ofrecen apoyo y ayuda... Cientos de brazos tendidos al vacío sin saber lo que significa el compromiso, pensando que toda la vida es un juego y si matas al malo, aparecerá de nuevo tres pantallas más adelante. Desconocedores de las consecuencias de los propios actos, juegan con la vida de los demás como un niño moldeando plastilina...

¿Y ahora qué? ¿Eso te hace feliz? Feliz me haría poder gritar a los cuatro vientos que soy libre, y que paso del puto culo de la gente de mentira. Feliz me haría no tener que morderme la lengua cada vez que abro la boca, para no "meter la pata". ¡¿METER LA PATA?! ¿Qué es eso? Meter la pata es decir las cosas tal y como las piensas y sientes. Meter la pata es decir algo inoportuno en el momento menos adecuado... Meter la pata es perder la espontaneidad y la sinceridad, virtudes tan valoradas en criaturas inocentes que aún no han pisado la pubertad.

Pequeñas criaturas incorruptas, más cercanas al estado animal que al humano. Estado animal, instintos... Procreación, supervivencia... Qué mal suenan estas palabras, a oídos del inepto que no ve más allá de cuatro normas éticas y sociales. El ser humano es incapaz de comer por necesidad: lo hace por hábito; no sabe lo que es tener sexo para procrear: lo hace por placer; no se relaciona con la manada para suponer un cobijo más seguro para sus crías y hembras: lo hacen por el reconocimiento social y la satisfacción de tener "cuanto más, mejor". Sí, sí, cuantos más tiburones acechen tu ano, más feliz y completo te sientes... ¿Y después qué? Después nada...

Polvo, cenizas, humo, aire... Aire reprimido, silencio ahogado... Murmullo lejano que cada noche grita por ser escuchado...

Bien petados por detrás

Sí, sí, sí. Señores. Así es, y así os lo cuento... ¿Cómo se puede putear tanto con un examen? Inventándose las preguntas, por supuesto. Y con toda nuestra dignidad, nosotros nos inventamos las respuestas...

Pero bueno... Después de dos meses esperando el desastroso final no es de extrañar. En realidad esta entrada es sólo para celebrar que ya ha pasado lo peor. Y ver cómo se dan los dos exámenes que quedan. Ciencias psicosociales aplicadas el viernes. Ése no me preocupa, después de meterme medio temario de fisio general en 4 días... Y bases técnicas de la práctica clínica el martes de la semana que viene. Es un poema. Seremos de los pocos españoles que ya no es que nos dé igual... Es que queremos, deseamos, NECESITAMOS que la selección esté de vuelta para entonces. Pero no parece que estén por la labor, así que más les vale por lo menos quedar bien colocados.

Y bueno, con esto ya celebrar que no queda nada para las vacaciones. Espero dedicarle más tiempo a escribir y menos a tuentiar y patatear. Y con su permiso aquí dejo esto, que tengo que ir a la ducha a quitarme este potingue de la cabeza. Saludos, y espero que hasta dentro de no mucho.

lunes, 28 de abril de 2008

Electroestimulación y Raro Sitio

Como de costumbre, he vuelto a abandonar mi pequeño rincón de desvariadas. He tardado, pues la foto del raro sitio se hacía de rogar, pero al final podré compartir con vosotros mi experiencia del primer día en el hospital de prácticas...

Como cualquier viernes, fue un día que comenzó a las 5 de la mañana, con la alarma del móvil que me avisaba de que era hora de levantarse, y así lo hice pasados unos minutos. Desayuno, ducha, pijama... Todo listo, tiramos hacia clase. La verdad es que los viernes, aunque entremos a las 8 de la mañana, da gusto. Clase con Javier Güeita, un hombre al que realmente merece la pena conocer a lo largo de tu vida. Explica cuatro conceptos básicos sobre electroestimulación, nos saca los cacharros de electroterapia y a practicar... Son cuatro horas que se pasan rápido, de buen rollo, sacando fotos y metiéndose corrientes estimulantes para el cuerpo... Sí, la verdad es que duelen, pero de las fuertes contracciones que generan, jeje. El descanso, como siempre, dura lo que nos apetece, según tarden más o menos en atendernos en la cafetería... Aunque un viernes a unas horas tan tempranas cuando no va ni el Tato a clase en mi facultad, suele haber bastante poco ambiente...

Después de clase, al aula de estudio en grupo a viciarme al Tekken mientras esta panda hace su trabajo de psicosociales y la rubia me abandona pa irse con su churri... Pero no se está tan mal.. Lástima que el cielo se fuera nublando poco a poco, desvaneciendo mis ansiadas ganas de tomar el solecito como buena universitaria que pasa media vida en "el prao".

13:30.- Un rato al sol, a quemarse y coger colorcito... Sí, colorcito rojo... Parece ser que sólo me incidieron rayos UVB y me produjeron hiperemia, porque los UVA ni los noto ya... Llega la rubia, comemos... Hamburguesa especial, con huevo y patatas, una hora antes de la llegada al hospital... Y, como de costumbre, nunca falta un comentario de alguien diciendo: "Joder, puto Juancar"... Si es que... ¿A quién se le ocurre meterse un cubata de larios con cocacola de un trago como si fuera agua justo antes de ir al hospital, con su excusa de: "Así me despierto"? ¡Sólo podía ser él!

Una vez en el hospital Fundación de Alcorcón y sin la llave del vestuario, tras esperar largo y tendido, llegamos al "Raro sitio". Un baño asistido (al que algún gracioso rascó las letras, pero queda chulo, nos da un toque personal) deshabilitado para los estudiantes de fisioterapia y terapia ocupacional para que nos apiñemos entre la mierda para cambiarnos todos juntos en armonía y felicidad... Y sesión de fotos. Y es que no te puedes juntar con un grupo de compañeros vestidos de hospital sin hacer las fotos oportunas... Y tiempo hubo, hasta que subieron los de seguridad con toda su larga pachorra a cerrarnos la puerta para poder bajar a encontrarnos con los fisios de turno...

La fisio que me tocó, la verdad, es genial... Es muy simpática y se aprende bastante... Los pacientes..., cada uno es un mundo la verdad. Al llegar yo estaba Isa con Urbano, un hombre cuya historia clínica me heló un poco la sangre..., aunque la tarde no había hecho más que empezar.

Con Virtudes la sesión tomó otros aires... Había confianzas, ganas de seguir adelante, de luchar... Teniendo en cuenta que todo el mundo pasa sus momentos de bajón, es bueno transmitir una ligera esperanza a quien realmente le puede hacer falta. Y es que una operación de prótesis de rodilla hecha de una forma tan chapucera da ganas de llorar a cualquiera... Pero ahí estaba esta mujer, siguiendo adelante, aunque quizás sólo gracias a que Isa se peleaba con ella para conseguirlo...

Luego nos tocó subir a planta. De camino a la habitación del siguiente paciente, revisamos la historia clínica y la prescripción médica... Parece mentira que haya tantos fumadores que viven sin miedo y de repente puedas ver cosas así y quedarte como si nada pasara en el mundo. Y es que una laringoctomía no es moco de pavo... Pero eso fue hace 40 años, y los problemas de este hombre se habían multiplicado... La fisioterapia este día sólo le tenía que enseñar la respiración abdominal, para aprovechar más su capacidad respiratoria, y una buena espectoración para eliminar bien las mucosidades de las vías respiratorias.

Luego bajamos a la UCI... la verdad, que a unas estudiantes de fisioterapia en primer año, con 18 añitos, llevarlas a ver aquello el primer día en un hospital... fue impactante, la verdad. Tubos y monitores por todas partes... Movilizaciones y más movilizaciones; lo importante es que José no pierda los grados de movilidad articular de sus extremidades...

Luego ya descanso, a la cafetería a reponer azúcar... De vuelta, nos enseñó Isa unas radiografías y un escáner de Urbano... Lo típico, enseñarnos a reconocer cuando hay algo que nos llama la atención, aunque sea por tener una idea general... Y luego finalmente un paciente realizando unos ejercicios de fortalecimiento de cuádriceps... La tarde después del descanso fue tranquila...

A la salida, mensaje de Facun.. Me esperaba en el parque de al lado del hospital, así que genial no tener que ir hasta la estación con el matancio que tenía encima... jejeje Y con todas las rayadas y el perro que se escapó y no volvía y el niño acabó volviéndose loco, son cosas que una prefiere conservar para sí.

Y en estas se terminó un día tan largo e intenso.. Espero que no os hayáis aburrido en la tercera línea, pero la verdad que la finalidad de esta parrafada era que este día quedara para la posteridad en algún recuerdo accesible... Espero haberlo conseguido y cuando vuelva a leerlo dentro de un tiempo recordarlo como si hubiera sido ayer.

\\Debbie//

viernes, 22 de febrero de 2008

Baila el Chiqui Chiqui

A falta de algo mejor que comentar, y puestos que ya se iba echando en falta una entrada... Os propongo que comentemos el famoso vídeo del Chikilicuatre...



En primer lugar, decir que me ha sorprendido bastante ver a Pedro Guerra como compositor (no tanto a Santi Segura como autor de la letra)...

Para quien no lo sepa, esta canción tiene bastantes probabilidades de representar a España en Eurovisión... Supongo que sigue esa filosofía de: "Ya que hacemos el ridículo quedando los cuartos por debajo... por lo menos damos el cante y nos reímos un rato..." Y demasiado...

Aquí os dejo la letra, que da para ir comentando por partes en las largas noches de insomnio...

¡Perrea, perrea!
El chiqui chiqui mola mogollón,
lo bailan en la china y también en Alcorcón.
Dale chiqui chiqui a esa morenita,
que el chiqui chiqui la pone muy tontita.
Lo baila Rajoy, lo baila Hugo Chávez,
lo baila Zapatero, mi amol, ya tú sabes.
Lo bailan los brothels, lo baila mi hermano,
lo baila mi mulata con la braga en la mano.
Y el chiqui chiqui se baila así:
¡Uno! El breikindance.
¡Dos! El crusaíto.
¡Tres! El maiquelyason.
¡Cuatro! El robocop.
Baila chiqui chiqui, baila chiqui chiqui;
los bailan los heavies, también los frikis.
Lo bailan en la cárcel, lo bailan en la escuela,
lo baila mi madre y también mi agüela.
Lo canta el Tigre Espuma con su traje a rayas,
y Juan Carlos le dice: "¿Por qué no te callas?"
En el velatorio del Padre Damián
pusieron chiqui chiqui y el muerto echó a bailar.
¡Bailarr!¡Bailarr, bailarr!
Y el chiqui chiqui se baila así:
¡Uno! El breikindance.
¡Dos! El crusaíto.
¡Tres! El maiquelyason.
¡Cuatro! El robocop.

No creo que esta canción hiciera ni una gotita de gracia en Eurovisión, pero más que nada porque sería necesario comprender el idioma, y también cosas básicas de la cultura de aquí, como por ejemplo la anécdota del Rey y su "¿Por qué no te callas?", la invasión del reggeatón en todas las discotecas de niñas calientes locas por mojar churros...

En pocas palabras... Me encanta el vídeo. ^^

viernes, 25 de enero de 2008

Nervios...

Como es obvio, se acerca el nerviosismo de los exámenes... Llevaba yo mucho tiempo sin escribir por aquí, y bueno, faltos de una ocasión mejor...

Métodos para apartar los nervios, está claro... Estudiar con tiempo, ir seguros al exámenes, confiar en uno mismo, imaginarse al profesor desnudo...

Toda una filosofía eso de imaginarse a la gente en bolas, ¿no? ¿Por qué se supone que esto nos relaja? Gran explicación:Los nervios son un estado alterado en el que te sientes indefenso... Y ¿quién va a estar más indefenso que alguien que no lleva ni ropa? Al imaginarte así a los demás, te relaja ver que no tienes de qué preocuparte, además de que cuesta tomarse en serio a una persona que no lleva ropa...

¿Nunca habéis soñado que llegáis a un examen y os dais cuenta de que habéis salido de casa desnudos? Menuda pesadilla eh... Así no hay quien se relaje y descanse...

"¿Cómo te va a tomar en serio Galán si en un examen le explicas cómo se hace un test muscular para la abducción de cadera y vas en calzoncillos?"

En fin, sólo quería hacer una reflexión, porque aún me cuesta hacerme a la idea...